Todos sabemos lo que son los aparatos de aire acondicionado. Son ampliamente usados tanto en frío industrial, como en casas particulares. Sin embargo, pocos saben que la aerotermia, es decir, el uso de bombas de calor, es un forma eficaz y ecológica de calentar una estancia. Frío y calor en una misma unidad nos permiten una climatización eficiente y respetuosa con el medio ambiente.
Aire acondicionado, ¿cómo funciona?
El aire acondicionado es un sistema que sirve para refrigerar un espacio mediante un proceso que extrae el aire caliente del interior de la estancia.
El compresor, condensa y hace circular el refrigerante a través de una unidad exterior, cambiando su estado de gas a líquido. Entonces se hace pasar al interior a través del evaporador. El evaporador es un intercambiador de calor, y los evaporadores aleteados, ampliamente usados en el sector del frío industrial, usan sus aletas para ampliar la superficie de absorción de calor, mejorando la eficiencia de todo el proceso. Es entonces cuando el refrigerante cambia el estado de líquido a vapor, eliminando el calor del aire, y volviéndolo a introducir en la estancia. En Tecnicold utilizamos refrigerantes ecológicos.
La unidad exterior hace cambiar entonces el estado del refrigerante de gaseoso a líquido eliminando cualquier resto de calor. Cuando el fluido sale del evaporador, se ha convertido en un gas refrigerado y vuelve al condensador para empezar de nuevo todo el proceso.
El funcionamiento de una bomba de calor
Una bomba de calor, básicamente, transfiere el calor de una zona a otra. Gracias a una válvula de inversión en la unidad exterior, la bomba de calor puede absorber calor del aire exterior incluso en temperaturas bajas. Las bombas de calor son muy eficientes en esta transferencia energética, es decir, consumen menos energía eléctrica en su funcionamiento que la energía calórica que proporcionan.
En el caso de las bombas de calor, el aire pasa a través del evaporador. Allí el líquido refrigerante absorbe la temperatura y cambia de estado. En este momento el refrigerante se transforma en gas y con un compresor aumenta su presión y circula por el calderín donde va cambiando de estado al ceder toda la energía acumulada.
Después, este fluido refrigerante, que vuelve a ser líquido, se hace pasar por una válvula y vuelve a su condición original para iniciar de nuevo el proceso.
Los aires acondicionados con bomba de calor
Estos equipos son muy versátiles y permiten la climatización de toda la casa, o de algunas zonas concretas, durante todo el año. En zonas de clima templado, como en la costa mediterránea, se muestran muy eficientes y son una buena alternativa a la climatización convencional, es decir, al uso de aires acondicionados por un lado y otros sistemas de calefacción por otro, permitiendo la calefacción, ventilación y refrigeración con una sola instalación.
Ayudan a bajar las emisiones de CO2 y son muy versátiles, ya que permiten instalar diferentes potencias en función de la superficie a climatizar. Además, con un mantenimiento correcto emiten poco ruido y son ideales para zonas como dormitorios, estudios o salas de estar.